miércoles, 18 de septiembre de 2013

Corazón dividido.



Tiene el corazón dividido. Dividido entre distintos lugares y diferentes personas.
Entre lugares que añora: Con verdes parques, hermosos lagos y magia en el aire, al menos para ella no había duda de que en ese lugar el aire no podía ser más mágico y los paisajes más pintorescos. Reinaba la amabilidad que en tantos otros sitios faltaba.
Un lugar que le cambió la vida no hay duda, un lugar que la cambió a ella. Y pese a esforzarse, en ningún otro sitio, a día de hoy, consigue sentir lo que sentía en aquel, ni verlos de esa forma, ni sentir la magia en el aire. A día de hoy su recuerdo, la llena de melancolía.
Así que, antes de irse, enterró bajo un número 15 un pedazo de su corazón, en aquel lugar y con aquellas personas que tanto amaba.
Su ciudad natal no la echaba de menos, bueno, sí que lo hacía, pero no de esa manera. Quizás porque tenía la suerte de volver a ella siempre que quisiera y porque siempre lo hacía.
Entre lugares que quizás nunca conozca: Muchos son aquellos sitios que su corazón quiere conocer, algunos guardan grandes amigos, otros grandes historias otros sólo belleza…
Y se dice a sí misma, que nunca es tarde, que algún día podrá, que encontrará el modo y el momento oportuno. Pero sabe que sólo lo dice para que su corazón no llore, pues quizás nunca pueda hacerlo.
Pero otro trozo de su corazón aguarda en la mesilla de noche, junto con los ahorros que algún día espera gastar en viajar.
Entre personas que ama: Personas algunas, que se encuentran en lugares que añora, lugares que quizá nunca conozca y lugares que le son familiares.
Un trocito estará siempre cerca de  la montaña, a los pies de un maravilloso complejo palaciego y fortaleza, no solo por lo hermoso del paisaje sino porque es el lugar donde empezó todo, donde conoció a la mayoría de la gente a la que quiere y donde siguen muchas de esas personas, algunas, de las más importantes de su vida.
Otro trocito, en este momento lo guardan 3 pares de manos, muy cerca del mar, pero no se quedará en ese lugar si ellos se marchan. Irá siempre con ellos porque los necesita, porque les pertenece, porque sabe que esas 3 personas son únicas e irremplazables, en su vida y en el mundoy porque al fin y al cabo, sólo tiene una hermana, pero no necesita más. Y no es que el lugar en sí no le agrade, es que no tuvo tiempo por desgracia, de prenderse de él también, más los recuerdos que guarda sólo son, como poco, mejor que buenos.
Otro pedacito está cerca del primero, cerca del número 15, sin embargo, mientras que el primero no se moverá de allí, porque es el lugar y los recuerdos lo que ama, el segundo lo guarda la familia y con ellos se quedará siempre porque necesita de su amor, sus risas entre las sabanas, sus canciones por las esquinas, necesita de su tsatsa y de sus niñas que no olvida ni un segundo pero que sabe que son muy afortunadas por los padres que tienen.
Y pensareis ¡pero está demasiado divido! Y no es mentira pero aún hay otras partes que se encuentran por ejemplo, en el centro del país, intentando acercarse a quien crece lejos; y en distintas manos amigas  que habitan diferentes países o incluso continentes….
Y es que no es fácil tener el corazón dividido, a veces duele mucho, sin embargo ella no lo cambiaría por nada porque sabe, que de no ser así no estaría tan lleno de amor.

domingo, 15 de septiembre de 2013

El aroma de mi ángel.



Abrió los ojos, su aroma inundaba el aire, estaba por todas partes y la llenaba de paz y de amor y de cosas que no se pueden explicar con palabras.
Y lo supo.

Imaginó que corría hacia ella y la abrazaba al fin, de nuevo.
Sonreía, con esa sonrisa que recordaba tan bien, llena de dulzura, de bondad y a la vez ese toque de melancolía en su mirada que siempre había tenido, a su parecer.
La mirada de alguien que había vivido mucho, pero no tuvo tiempo de contarle todas las cosas que llenaron su vida.
Veía las arrugas marcadas en su rostro y, sin embargo, no podía ser más bello a sus ojos.

Quería decirle cuanto la echaba de menos, cuanto sentía las cosas que no debía haber dicho y las que deseo haberle dicho, quería poder verla y tocarla a menudo, pero ya no era posible.
Sin embargo, pensó en un lugar donde todo era posible ¿y quién tendría derecho a decir que no era real? ¿acaso el amor no supera las fronteras de este mundo?

La nombro su ángel de la guarda o quizás no lo inventó, sino que lo sintió, para así estar siempre juntas, incluso cuando se olvidara de pensar en ella, porque en el fondo siempre la tenía presente.

Y muchas noches, antes de dormir intentaba soñar con ella, reencontrarse al fin.
Aún no lo ha conseguido, quizá deba poner más empeño, quizás sea necesario más esfuerzo para conseguir algo tan valioso. Sin embargo sabía que podría no ocurrir nunca pero tomó la decisión de no dejar de intentarlo, de mantener la fé que ella siempre había tenido y de cambiar el “adiós” que nunca dijo por “nos veremos en otro sueño”.

Sin embargo nunca dudó que estuvieron juntas una vez, aunque no pudo verla, y tampoco de lo mucho que se seguían queriendo la una a la otra.